La piscina más grande del mundo y el fabricante de paraísos.

¿Se puede dejar de publicar durante un mes en un blog? Claro que se puede, a pesar de que muchos no lo recomiendan. Pero a pesar del receso, lo mejor es volver a publicar y con ganas. Por eso estoy de vuelta con nuevas curiosidades que uno va descubriendo, para enterarse que la mejor ficción es la realidad.

Resulta que ahora, si estamos lejos del paraíso, podemos fabricarlo. Chile posee una costa lejana a los climas tropicales y las playas de postal, el mar es de aguas muy frías y corrientes muy peligrosas. Sin embargo es posible encontrar paisajes (engañosos) en donde el mar turquesa y de aguas templadas y cristalinas, puede estar combinado con palmeras al mejor estilo caribeño. El paraíso puede estar a la vuelta de la esquina, al menos esa es la idea del empresario chileno Fernando Fischmann, quien se dedica con su empresa a diseñar y hacer realidad pequeñas réplicas del paraíso, en zonas no tan idílicas del planeta.

Su mayor descubrimiento es la posibilidad de mantener grandes volúmenes de agua en forma cristalina, sin utilizar métodos tan costosos como el filtrado. El método para conservar el agua, patentado en todo el mundo, permite reducir los costos para construir inmensas piscinas que parecen un mar con un costo mínimo de mantenimiento.

Su primer proyecto de alto impacto, el complejo vacacional desarrollado en San Alfonso del mar, Chile, figura en el Guinnes de los récords por poseer la piscina más amplia del mundo, de unas 8 hectáreas. Un inmenso lago casi geométrico con tres lagunas unidas por un canal de cuatro metros de profundidad. Una piscina que a vuelo de pájaro (Google Earth), se ve tan impresionante como lo muestra la imagen:

Las dimensiones de la piscina son para el asombro: 1012 metros de largo en extensión contienen el agua salada equivalente a 6000 piscinas residenciales. En su interior se realizan todo tipo de deportes náuticos y hasta eventos con regatas oficiales incluidas. Su mantenimiento asciende a US$ 4.000.000, y el costo se solventa por las contribuciones de los arrendatarios y dueños de los departamentos que rodean la piscina, aunque aseguran que es mucho menos que lo que sale mantener una piscina en casa. Todavía me acuerdo de mi pelopincho.