Camellos en Australia, castores en Tierra del Fuego o un monstruo verde en el sur norteamericano. Fuentes de importantes amenazas a la biodiversidad, la introducción de especies foráneas en territorios desconocidos son una amenaza capaz de llevar a la extinción a las especies pertenecientes al ecosistema autóctono. Se calcula que el 80 % de las especies amenazadas se encuentran en tal situación por la competencia o depredación que padecen de parte de especies invasoras.
La actividad humana, muchas veces de modo inocente, ingenuo, o en situaciones, involuntariamente o por desinformación, introduce especies foráneas en ecosistemas equilibrados por miles de años de evolución. Los resultados pueden ser catastróficos: alteraciones en la precaria biodiversidad, desplazamientos de especies autóctonas y hasta extinción, con graves daños irreversibles son algunas de las consecuencias.
A continuación, repasamos algunos ejemplos de la introducción forzada de "vecinos invasores", aquellas especies que sin que nadie las llame, arrasan con todo en su nuevo hábitat, en condiciones de vida facilitadas por la inexistencia de sus depredadores naturales:
1. Camellos dromedarios en Australia
Imagen en OzAnimals
Considerados como una especie invasora, para muchos resultaría llamativo encontrar miles de camellos dromedarios pastando en la extensa y árida área central de Australia. Entre los años 1840 y 1907 miles de camellos dromedarios fueron importados para utilizarlos como animales de tiro en la exploración y construcción de líneas de ferrocarril y telégrafo. La adaptación a las condiciones del desierto resultó tan efectiva, que en la actualidad perduran con miles de ejemplares sobreviviendo a la deriva en amplias zonas del centro oeste australiano. Se calcula que la población actual de dromedarios salvajes (camelus dromedarius) ronda entre los 80.000 y 200.000 ejemplares, especialmente en el territorio de Queensland.
2. La peste verde Kudzu.
Imagen SoftCore Studios
Es apenas una planta de la familia Fabaceae, introducida en la costa sureste de los Estados Unidos, y originaria de bosques en algunas regiones asiáticas de China y Japón, pero los efectos de sus expansión en pocos años resultaron devastadores.
Imagen Tinydr
Introducida en el año 1876 como planta de cultivo y ornamental, se transformó en un verdadero monstruo verde, capaz de abarcar todo el sureste de Estados Unidos tragando literalmente casas enteras en su imparable avance.
Imagen en Ziza
Las condiciones perfectas para crecer sin depredadores, reproducieron a la especie Kudzu hasta transformarla en una plaga de malas hierbas, declarada como tal en el año 1953.
3. Castores en el Fin del Mundo
La introducción de castores en la Tierra del Fuego, al sur de la Patagonia argentina, tuvo resultados catastróficos: una invasión biológica descontrolada. La introducción de 50 castores naturales de Canadá para impulsar la industria peletera terminaron por resultar un desastre: en la actualidad, se calcula que unos 55.000 castores sin depredadores naturales se ocupan de destruir el bosque fueguino alterando todo el paisaje.
Imagen Villamota
No sólo la destrucción de bosques es un problema, además, la construcción de represas con troncos termina inundando zonas rurales y transformando el área en un panorama desolado. Actualmente el gobierno de Tierra del Fuego implementa programas de caza para reducir la población de castores.
4. El imperio de la hormiga argentina.
Mucho antes de las repetitivas crisis económicas de la tierra del tango y el asado, desde el sur del mundo emigraron hormigas que se expandieron con facilidad por todo el mundo, especialmente hacia zonas de clima mediterráneo, o en territorios con condiciones ideales para su proliferación como California, donde dan trabajo a numerosas compañías exterminadoras de plaga.
Introducida involuntariamente por el hombre en los cinco continentes, probablemente a través de buques de transporte, y gracias a su comportamiento invasivo conformando colonias gigantescas, la hormiga argentina es uno de las especies invasoras más destructivas, tanto como para acabar con todas las especies nativas de hormigas y provocando cambios drásticos en el ecosistema al alterar su equilibrio natural.
La hormiga argentina afecta con sus colonias invasoras vastos territorios del planeta. El tamaño de las colonias y su territorio suele ser descomunal, tanto como para abarcar territorios de más de 160 kilómetros de extensión. Se cree que la colonia más grande de hormigas argentinas, asentada en Europa, abarca desde el norte de Italia, hasta la costa atlántica española, con unos 6.000 kilómetros de extensión.
5. La invasión del Mar Mediterráneo.
Uno de los ejemplos documentados más impresionantes de invasiones foráneas es probablemente la que sucedió a partir del año 1869, cuando la intervención del hombre, a través de la apertura del canal de Suez, unió al Mar Mediterráneo con el mar Rojo y el Océano Índico. Se produjo la invasión de especies marinas más abrupta de la historia, con la incorporación de 300 especies provenientes del Índico que se adentraron rápidamente en el Mediterráneo, conformando el 4 % del total de especies del ecosistema actual.
Imagen en Segue
La invasión del Mediterráneo y la alteración por los abusos de la pesca es un fenómeno constante con efectos notables cada año. La alteración del ecosistema ha provocado por ejemplo fenómenos más visibles como la invasión masiva de medusas en las playas de la costa mediterránea europea, u otras invasiones más silenciosas, como el desplazamientos de 500 especies exóticas procedentes del mar Rojo, entre las que se cuentan especies de algas que transforman todo el paisaje del lecho submarino.
No menos importante, y difícil de calcular, es el efecto en el ecosistema marino global del transporte de organismos a través de los cascos de embarcaciones que durante siglos viajaron por todo el planeta. En el mundo actual, la homogeneización de las poblaciones de plancton en todos los mares es una consecuencia directa de la actividad del transporte marino del hombre, una verdadera globalización biológica marina a escala planetaria.
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Excelente artículo. Me llama mucho la atención (aunque no sorprende) que en los 5 casos, el responsable directo o indirecto de las invasiones sea el hombre.
ResponderBorrarMuy bueno. Hay muchas más la rata noruega que se extendió por todo el mundo, también en Australia los conejos,... y eso sin hablar de microbios y bacterias.
ResponderBorrarSiempre es el hombre el responsable.
Asi es el hombre, destructor. Pero sigo confiando en el, tengo esperanzas, en el y en Dios.
ResponderBorrarBien por tu reportaje, Matias .
camaraymicrofonos.blogspot.com/
“ VICHEANDO “
hombre, yo no es que sea biologo ni nada por el estilo, pero, si hace unos millones de años, la disposicion de los continentes y oceanos era otra, no creo que sea tan antinatural que se unan el indico el mar rojo o el mediterraneo, o que haya camellos en australia, quizas creemos que somos mas importantes de lo que somos en realidad...
ResponderBorrarInteresante post. Creo que falta el cangrejo americano.
ResponderBorrarNo olvidemos que el primero es el hombre el que ha emigrado por todo el planeta, desde hace miles de años, y simplemente está acelerando los que tarde o temprno tendria que pasar.
ResponderBorrarExcelente artículo...
ResponderBorrarEn España tenemos, desgraciadamente, algunos ejemplos: la perca americana o black bass, el cangrejo americano como mencionaron antes, la malvasía cariblanca (Oxyura jamaicensis), que se cruza con nuestra querida Malvasía (Oxyura leucocephala) y un largo etcetera...
Gracias por este interesante post.
Un saludo.
Excelente. Eso es producto del positivismo de fines del siglo 19 y principios del 20. En la actualidad creo que ya no se cometen ese tipo de estupideces (por lo menos tan visibles -o previsibles-).
ResponderBorrarla culpa de todo es del "HOMO SAPIENS SAPIENS"
ResponderBorrarmi blog: crema de la meca
Este caso lo vi en persona en un reciente viaje por Nueva Zelanda, de hecho ibamos en una caravana con una amigo que es de allí, y cada vez que se cruzaba uno por la carretera casi nos matábamos por atropellarlo. Es una verdadera plaga todavía actualmente:
ResponderBorrarEl Possum o Opossum es uno de los mamíferos que viven en Nueva Zelanda que fueron introducidos por los Polinésios traídos como fuente de alimento para grandes viajes. Como se reproduce muy rápido y no tiene predadores en Nueva Zelanda, volcó una verdadera plaga, comiendo plantaciones, causando grandes perjuicios a los hacendados y casi causando la extinción del Kiwi por la destrucción de su hábitat. La infestação llegó hasta tal punto, que el gobierno llegó a pagar un dolar para cada possum que alguien matara. Incluso tiendas, pasaron a producir y promover artículos como abrigos y bolsas, con lo por lo del Opossum (que es blando). En Australia, el Possum es protegido, pero allá él tiene predadores como culebras, lo que en Nueva Zelanda no acontece.
Olvidaste la plaga de conejos que hubo también en australia
ResponderBorrarDeberias documentar los hipopótamos en Colombia, Pablo Escobar el famoso narcotraficante trajo al pais dso parejas de hipopótamos hace unos 20 años, ahora hay mas de 30 que viven dentro y fuera de la hacienda Napoles donde vivia el extinto capo. Hace pocos días uno de los hipopótamos fué cazado y fué de gran despliegue a nivel nacional
ResponderBorrarEn Venezuela hace unos años, creo que fue por el 2006, el año en que regresé de Alemania, el lago de Maracaibo, ciudad donde viven mis padres hoy día, un barco trajo una especie de planta acuática pegada a su casco, a la que llamaron lemna, no sé si será su nombre verdadero. Con el calor de Maracaibo (que puede superar los 40 grados en cualquier día normal) y las condiciones de contaminación por petroleo del agua (la cuenca petrolífera del lago es una de las más importantes del mundo), la lemna creció y el lago se volvió verde en un par de meses. Los pescadores decían que se arruinaban los motores de las lanchas, el olor que despedían era putrefacto, y algunas personas podían caminar de muelle a muelle sobre las plantas (mi padre tiene unas fotos de eso).
ResponderBorrarFue todo un suceso, no tengo noticias de que hayan podido eliminarla del todo...
=/
PD: el lago de Maracaibo es el más grande de Sudamérica.